Hija pródiga
Fuente: La Jornada / Agosto 2019
Nacida en París, en 1976, Laurence Debray pasó gran parte de su vida convencida de que había sido un "tropiezo" en la vida de sus andariegos padres, el filósofo Régis Debray y la antropóloga venezolana Elizabeth Burgos… hasta que, durante el proceso de investigación para su libro 'Hija de revolucionarios' (Anagrama, Barcelona, 2018), se topó con este párrafo de los diarios del Che Guevara: "Danton (Debray) viene a quedarse, pero yo le pedí que volviera a organizar una red de ayuda en Francia y de paso fuera a Cuba, cosa que coincide con sus deseos de casarse y de tener un hijo con su compañera(..)" Desde el otro mundo, el Che que, irónicamente, no resulta tan simpático a Laurence, susurró a su oído que había sido una hija deseada y planeada.
Nada más lejos del marxismo y la guerrilla que una ama de casa y banquera de profesión, casada con otro banquero que, para colmo, cuando decide emular a sus padres y emprender la escritura de un primer libro, opta por una biografía del personaje que más admira en el mundo: el rey Juan Carlos I.
La manzana no pudo haber caído más lejos del árbol. La hija admite su vínculo con naturalidad, no exenta de orgillo, aunque salte a la vista que de niña echó en falta un hogar sólido, como ella misma dice, y pertenecer a la casta superior de los "normales".
Casados durante el encarcelamiento de Régis en Bolivia que, se supone, duraría treinta años, el 14 de febrero de 1968, fecha elegida por los militares -¿romanticismo, ironía, casualidad?-, el presunto guerrillero al servicio del Che y su "compañera" unieron sus vidas, no por "legitimar" un prolongado amasiato, sino para facilitar el acceso de Elizabeth al prisionero que sólo podía recibir visitas de familiares y diplomáticos franceses.
Lee más sobre 'Hija de revolucionarios', un libro sincero y directo, escrito por Laurence Debray aquí: https://semanal.jornada.com.mx/2019/08/04/biblioteca-fantasma-9248.html